OBR fue fundado en el año 2000, cuando Paolo Brescia y Tommaso Principi, unidos por una sólida amistad nacida mientras ambos trabajaban para Renzo Piano, decidieron crear una red con otros colegas, iniciando un intercambio de ideas entre Génova, Londres, Nueva York y Bombay.
Con su proyecto ganador presentado en el concurso internacional para el Museo Pitágoras, OBR definió un conjunto de temas recurrentes en su práctica: la arquitectura como medio para promover un sentido de comunidad y la expresión de identidades individuales, mediante una narrativa colectiva que une generaciones, culturas y formas de conocimiento diferentes.
Pero fue otro proyecto ganador el que amplió aún más el horizonte de investigación de OBR: el Complejo Residencial Milanofiori. En este caso, la determinación de combinar opuestos —interior y exterior, natural y artificial, público y privado— se tradujo en una reflexión más profunda sobre el significado esencial del habitar, en el sentido de “cuidar”, dando paso a una nueva idea de arquitectura relacional que crea espacios sensibles en continua evolución que interactúan con sus habitantes a través de los intercambios dinámicos entre las personas y el entorno.
Concibiendo la realidad en la que diseña como un juego de espejos en interacción continua y mutua, con reacciones y contrarreacciones, la investigación de OBR propone una visión holística no centrada únicamente en el ser humano, sino en su relación con el entorno, adaptando al ser humano al medio, y no al revés. La de OBR es, por tanto, una arquitectura basada en las relaciones, más que en los objetos, un sistema abierto que actúa sobre el tiempo más que sobre el espacio, acogiendo incluso lo imprevisible.
Trabajando sobre el patrimonio existente —el Palazzo dell’Arte de la Triennale de Milán, la Galería Sabauda de Turín y el Museo Mitoraj de Pietrasanta— OBR replantea la relación entre edificio y lo construido: el proyecto no se concibe como la suma de sus partes, sino como un todo, sin dejar espacio al “estilo”, buscando una correspondencia entre lógica constructiva y expresiva. Combinando innovación tecnológica y tradición cultural, OBR evita soluciones icónicas ostentosas y propone una arquitectura que está “ya allí, desde siempre”, que pertenece a su tiempo y a la vez se percibe como si siempre hubiera existido, superponiendo presente, pasado y futuro.
Tras casi dos décadas, el grupo original ha incorporado un nuevo socio, Andrea Casetto, y se ha consolidado en un equipo de cuarenta arquitectos con sede en Milán, dedicados a la investigación experimental y comprometidos con proyectos de fuerte valor social. Como equipo, han desarrollado un enfoque del diseño arquitectónico como proceso diacrónico.
Abiertos a diferentes aportaciones multidisciplinarias, Paolo Brescia y Tommaso Principi han sido invitados a diversas universidades como la Academia de Arquitectura de Mendrisio, la Universidad Aalto de Helsinki, la Academia de Arquitectura de Bombay, la Universidad Mimar Sinan de Bellas Artes de Estambul y la Universidad Internacional de Florida en Miami.
Los proyectos de OBR han sido expuestos en la Bienal de Arquitectura de Venecia, en el Royal Institute of British Architects de Londres, en la Triennale de Milán, en la Bienal de Arquitectura de Brasilia y en el Cooper Hewitt Smithsonian Design Museum de Nueva York. Desde 2018, sus obras forman parte de las colecciones permanentes del MAXXI en Roma.
OBR ha recibido la mención de honor del AR Emerging Architecture RIBA en Londres, el Plusform under 40, el Urbanpromo en la XI Bienal de Arquitectura de Venecia, el Europe 40 under 40 en Madrid, el LEAF Award en Londres, el WAN Residential Award, el Building Better Healthcare Award, el premio nacional In/Arch para jóvenes diseñadores, el MIPIM Award de Cannes y el American Architecture Prize en Nueva York.